Los jeans son prendas fascinantes. Siempre presto atención al lenguaje con el que las marcas hablan del denim, tan cargado de historias y conceptos. Hace poco comentaba lo mucho que me impactó la nueva imagen de campaña de jeans de Arturo Calle, realizada en Rumania con la agencia Lowe/SSP5.
Con escenas salvajes, un simple acabado de lavandería sobre el denim se convierte en símbolo de vigor masculino. No puedo sino admirar la forma en la que algo como un rasgado (efecto de diseño que tiene cualquier jean de cualquier marca), se convierte en parte de una historia épica, gracias a una impecable fotografìa (comentando el tema, decía también lo fácil que un concepto así podría ser de mal gusto, con un mal manejo estético de la imagen).
La respuesta a mi entusiasmo frente a la campaña fue comentar lo desconectada que está del ADN de la marca. Pasar de ese espíritu preppy, del hombre pulido y tradicional al hombre de impulsos y audacia sí parece un gran salto, pero -según me enteré por representantes de la marca- es solo una parte de la estrategia de evolución de AC, que busca ser más internacional (actualmente incursionan en Panamá, El Salvador y Costa Rica).
La marca recientemente lanzó su propuesta de moda infantil masculina, AC Kids, y el año pasado comenzaron a sonar rumores de una futura línea femenina. La línea de jeans parece seguir esa idea de renovación, elevando la oferta actual a diseños más contemporáneos, atrevidos y procesos industriales más fuertes.
Admiro la iniciativa de la marca por rejuvenecerse, aunque se mantiene tímida si se compara el impacto de las fotos de campaña con el estilismo de las fotos de la colección. Yo esperaría que ese hombre salvaje se asomara un poco más en atuendos menos refinados y más llenos de riesgos.
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| Quisiera ver realmente esos procesos salvajes destacándose, pero en los looks finales se diluyen por completo. |
En realidad, el contraste entre esta nueva campaña y la imagen que tiene el consumidor tradicional de AC parece radical. Creo que falta un largo e interesante camino por recorrer. Espero ver hasta dónde llegan los cambios del hombre Arturo Calle y si la próxima campaña logra dejarme nuevamente sorprendida.
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