El fenómeno de la pronta
moda no es una novedad. En realidad, ha moldeado los patrones de consumo de la
última década, cambiando por completo la velocidad con la que la moda se movía. En Colombia
el tema se discute desde hace algunos años, pero solo ahora podemos decir que
nos ha “invadido” al mismo nivel de los países que vieron nacer este sistema. No
solo eso, las marcas nacionales han
comenzado a seguir la misma ruta para no quedarse atrás.
Aclaremos primero lo que
define a una marca de Fast Fashion:
Se trata de marcas que
siguen el modelo español de producción y distribución, como ejemplo
indiscutible está Inditex y su marca insignia, Zara. Otros representantes serían Mango –también española- o Forever
21, la marca norteamericana que llegó a Colombia recientemente, despertando
nuevamente este tema.
Algunas
características del modelo:
-Producción de series cortas: se diseña, produce y
distribuye a alta velocidad pues la prioridad es ofrecer moda actual, ceñida a
las más recientes tendencias. Estas marcas rotan mercancía al menos una vez por
semana, a veces dos. O sea que siempre hay productos nuevos.
-Precios bajos: acceso a las tendencias para
cualquier bolsillo.
-Producción barata: los precios bajos son solo
posibles con materiales económicos y mano de obra en condiciones laborales
cuestionables.
Una
de las consecuencias más importantes de la llegada del Fast Fashion es la democratización
de la moda: cada vez más personas con acceso a las tendencias actuales. La
posibilidad de un colombiano de clase
media de comprar las mismas prendas que se están ofreciendo en Japón, en
París, en Nueva York, al mismo tiempo.
Este fenómeno cambió la moda, no solo por hacer que la novedad dejara de ser
costosa sino por globalizarla: todo un planeta que puede vestir “a la última
moda”.
La fila de personas a la espera de la apertura de Forever21 en el Centro Comercial Santafe de Medellín. |
La población colombiana es seguidora de tendencias. Para el país, la entrada de estas marcas globales representa una apertura a la cultura de la moda y a información de tendencias que podría reconstruir la estética vestimentaria. Se aprenderá más sobre moda y para muchos, será la oportunidad de sentirse actualizados al vestir.
Siempre
he tenido la impresión de que la moda nacional intenta partirse en dos. Por un
lado está la moda popular, masiva:
los jeans sin bolsillos, las siluetas
ajustadas, la pedrería brillante, los estampados escandalosos, la llamada moda “de
mal gusto”. Por otro lado está la moda
de las élites: estética europea, un deseo desesperado por aparentar esbeltez,
bolsos de diseñador, tacones de aguja, “el buen gusto” como lo llaman los
promotores de esta segmentación.
El
Fast Fashion hace que se cierren
estas brechas, pues pone en manos de
todos la misma moda. De hecho, la práctica común de las marcas que siguen
este modelo es plagiar diseños de
otras marcas y de casas de Alta Costura. Así existen entonces quienes pueden
comprar un Balenciaga original y quienes logran el mismo look con la versión
económica de Zara.
Ética Made in China
En términos éticos, estas marcas son un modelo altamente cuestionable. Empecemos por el hecho de que no garantizan condiciones laborales justas para quienes confeccionan sus productos. Por lo general este proceso se subcontrata a fábricas en países pobres donde hay poco control sobre los salarios, los horarios o las condiciones en las que se trabaja. Esto significa que las prendas de estas marcas pueden fabricarlas niños, ancianos o personas que no reciben un pago suficiente por más de 12 horas de trabajo diario. La producción de moda es la nueva esclavitud.
En términos éticos, estas marcas son un modelo altamente cuestionable. Empecemos por el hecho de que no garantizan condiciones laborales justas para quienes confeccionan sus productos. Por lo general este proceso se subcontrata a fábricas en países pobres donde hay poco control sobre los salarios, los horarios o las condiciones en las que se trabaja. Esto significa que las prendas de estas marcas pueden fabricarlas niños, ancianos o personas que no reciben un pago suficiente por más de 12 horas de trabajo diario. La producción de moda es la nueva esclavitud.
"Fashion Victims" es una acción urbana de Yolanda Domínguez, inspirada en el derrumbe el 24 de abril de varios
talleres textiles en Bangladesh que acabaron con la vida de 1.127 trabajadores. Busca dar visibilidad a los verdaderos "fashion victims": los
trabajadores esclavizados, la explotación infantil y los millones de
perjudicados por la contaminación que producen las fábricas en los
países de producción.
En
cuanto al plagio de diseños, muchos
plagiados toman acciones legales para proteger sus creaciones, pero por lo general estos procesos son bastante
largos y cuando se determinan multas o acuerdos, ya la marca de Fast Fashion vendió todas sus existencias o libró suficiente dinero como para no
preocuparse por el costo de la penalidad. Suele suceder que estas marcas
copian, producen y venden conscientes de
que serán demandados y simplemente indemnizan, pues les cuesta menos que
pedir licencias.
Personalmente, lo que más me incomoda del Fast Fashion es esa percepción de la ropa como algo efímero. Este modelo ha llevado el consumismo a nuevos niveles de irresponsabilidad, pues la ropa barata dura poco, especialmente cuando se presiona a tener que vestir de tendencia. Es una cultura de lo desechable, de la compra por la compra. Me parece bien absurdo ese llamado que hace la moda a que nos llenemos de cosas porque sí.
“Compre colombiano”
Conozco
diseñadores nacionales que se han
llenado de temor con la aparición de estas marcas en Colombia y después del
paro agrario de este año, se alborotó el discurso patriótico de “Compre
Colombiano”, un discurso lleno de incoherencias.
Con la controversia creada por el paro agrario, se promovió en redes sociales el consumo de productos con el código de barras de "productos colombianos". |
Sin embargo, la causa de "compre colombiano" estaba mal informada pues el código de barras con 770 no significa que el producto es Colombiano. |
Aterricemos
primero: al consumidor colombiano NO
le importa la ética, le importa la apariencia y los precios bajos. La moda ética es un privilegio, no solo
para los mejor informados, sino para los que cuentan con el dinero suficiente
para comprar por principios y no por promociones. Solo se comprarán
productos nacionales cuando estos den la talla y es aquí donde entra la
incoherencia:
Las marcas grandes nacionales ya se rindieron ante estos modelos de producción a bajo costo. Comprar de una marca “colombiana” no garantiza que la ropa se produzca en Colombia. Hagan el ejercicio de mirar las etiquetas la próxima vez que entren a los almacenes de cadena y a las tiendas de marcas nacionales en los centros comerciales: todo es Made in China/Vietnam/India/Etc.. La única diferencia con las marcas de Fast Fashion es que no logran igualarlas en velocidad de tendencia.
A
nivel de gobierno tenemos una gestión lamentable. Institucionalmente se buscó
el apoyo al TLC como una oportunidad
para expandir marcas nacionales cuando debieron crearse mecanismos de
protección a la economía interna. Por fin llegaron las marcas globales a
comerse el mercado y la única solución que plantean ahora esas mismas
instituciones es intentar que la industria nacional se parezca más a ese
monstruo de la moda rápida.
En
el Pabellón del Conocimiento de Colombiamoda 2013 se presentaron al menos 6 conferencias en torno al modelo de series cortas. Se promovieron sus bondades, tocando superficialmente
el tema de las condiciones laborales como una “amenaza” para el desarrollo empresarial.
En
la conferencia inaugural, Luz Adriana Naranjo, directora de competitividad
empresarial de Inexmoda, reconoce que “las
exportaciones no son tan dinámicas como lo fueron hace unos años”. También afirma
que “si competimos con precio, China y otros países asiáticos lo harán más
barato”.
Fábrica de confección en Bangladesh |
Como compradora informada, saqué mis propias conclusiones frente al panorama de moda nacional:
1. Da lo mismo comprar en Zara o Forever 21 que comprar en Tennis o en
El Éxito. Ninguna marca grande puede garantizarme ya que respeta a sus
empleados.
2. Debo intentar reducir mi consumo de moda:
-Compro ropa de segunda
cuando es posible.
-Altero las prendas que ya no uso para hacerlas más actuales.
-Lo que compro en almacenes
de marca supera la vida útil de las
tendencias (tengo jeans de Fast Fashion
con más de 5 años).
3. Discuto este tema con
otros. Los consumidores bien informados
pueden cambiar la forma en que opera este negocio. Si no tuviera esa esperanza, no habría escrito este carretazo.
Muy buena entrada. Muy muy buena.
ResponderEliminarDos puntos claves:
1. Que se masifique el 'status'. Y es una táctica que vende muy bien. De hecho, hay un sociólogo llamado Mike Featherstone que habla de esos temas. Solo que tú lo has dicho de forma más sencilla.
2. Siempre siempre trato de mirar la etiqueta de los productos que compro. Pero da tristeza que uno de los 'orgullos colombianos', como lo es (o era) la industria textil se rinda ante la producción barata.
De hecho, todos nos rendimos.
Muchas gracias.
EliminarNo conocía a Mike Featherstone. Lo buscaré porque el tema me parece bien interesante.
Yo renuncié al tema de las etiquetas porque ya no le creo a ninguna marca grande. Igual lo que les compro, procuro no convertirlo en basura.
Espero que no nos hayamos rendido todos.
Diana, qué gusto leer esta clase de artículos en nuestro país. El consumidor nacional muy pocas veces conoce la historia detrás de las prendas que adquiere, y el tema de la ética de producción apenas está tomando relevancia.
ResponderEliminarTe envío un gran saludo!
Muchas gracias, Camilo. Tienes razón en que se conoce poco del origen de las prendas. Esperemos que el tema ético se haga cada vez más visible :) saludos!
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMuy buen articulo, La parte que mas me gusto es cuando cuentas que discutes este temas con otras personas para que se informen, yo también hago esto cada que puedo, realmente hay una falencia en el consumidor pocos conocen el fast fashion, y mucho mas triste la mayoría desconoce lo que paso en Bangladesh; si comparamos las muertes en este edificio con la caída de las torres gemelas, en bangladesh murió el equivalente de una torre completa... y este echo no nos mueve ni una sola fibra... esto es lamentable.
ResponderEliminarMe gustaría mucho que leyeras mi articulo sobre la llegada de Forever 21 a Medellin y me des tu opinión.
http://vanitavanitatum.blogspot.com/2013/10/quiero-tener-por-siempre-21.html
un saludo!
Laura
Excelente post Diana, me encantó. Muy "nutritivo" como digo yo.
ResponderEliminarMi aporte para reducir mi consumo de moda es que cuando no encuentro una prenda adecuada, compro la tela y la mando a hacer, sucede con frecuencia.
Excelente idea. Hace muuuucho no mando a hacer prendas, pero el antojo siempre está ahí. Es una muy buena solución porque además la prenda queda justo como uno la quiere.
Eliminaryo tambien me siento frustrada por que siempre que voy de compras miro las etiqueta y la gran mayoria son hechas en esos paises donde no hay buenas condiciones laborales, me gustaria comprar productos colombianos pero como tu dices son mas costosos. pero por otro lado Zara no me parese que este en colombia con precios justos a comparacion con los de españa donde en realidad si es economico. creo que debemos ser mas concientes de lo que compramos y no caer en los brazos del consumismo! muy buen pst!
ResponderEliminarTienes razón en anotar que Zara no llega a Colombia con los mismos precios que está en España. La diferencia es muy fuerte. Algunos productos de Zara en Colombia cuestan casi el triple que en España.
EliminarMuy bueno tu post y me gustaría agregar algo para discutirse. A mí lo que me parece aún peor que el Fast Fashion son cuando las grandes marcas de diseñadores también producen en fábricas con pésimas condiciones de trabajo y en muchos casos, en las mismas que los de FF. En los casos que expones por ejemplo, cobrar 500 dólares por una prenda cuando la pagan por el mismo precio minúsculo a la fábrica (tal vez 5 dólares?) por la etiqueta que tiene se me hace terrible y aún más injusto para la gente que trabaja para producirla. Independientemente del diseñador o marca, una prenda debería costar proporcionalmente a su costo de producción. Prefiero que un diseñador de renombre cobre caro por la calidad de los insumos y mano de obra que por la simple etiqueta. Esto también se puede aplicar para las tiendas de FF nacionales o internacionales. Hablando de Zara por ejemplo, todavía existen piezas hechas en Portugal que deberían haber sido mejor pagadas que las que están hechas en Bangladesh.
ResponderEliminarEs muy triste que los diseñadores famosos hayan mantenido los mismos precios altos que cuando hace años verdaderamente un artesano experto en su oficio producía su prenda de forma única para el diseñador. Tal vez esa es la solución para el diseño latinoamericano, no tratar de competir con el FF mandando todo a fábricas fuera de nuestros países sino cobrar justamente por el verdadero trabajo y calidad (la cual tenemos muchísima) que hay detrás de una pieza impulsando a quién la creó con pago justo.
Mi primera conclusión es que da lo mismo a quién se le compre por lo que dices: ya nadie puede garantizar un trato ético a sus empleados, ni las tiendas de FF ni los diseñadores. Es una situación bastante lamentable.
EliminarMe parece que el rumbo que sugieres sería realmente el ideal. Procurar una producción y un consumo más local que permita un mayor equilibrio entre lo que cuesta fabricar y lo que se paga.
Yo he ido gradualmente escogiendo comprar menos ropa, pero que se sienta más fina, así tenga que pagar más por ella.
ResponderEliminarEstar pegado de tendencias no solo es irresponsable, sino aburrido: todo el mundo termina viéndose igual.
muy interesante, esperaré más sobre esto! gracias
ResponderEliminarEstupendo artículo Diana. Encuentro muy, muy interesante lo que planteas... sobre todo porque tengo la sensación, que es la primera vez que leo algo relacionado con moda, de alguien que evidentemente le gusta la moda (reflexiona y trabaja en la moda), pero en una 'clave' distinta. Interesante y lamentable lo que señalas del fast fashion. He pensado, muy a propósito de Zara que este asunto del fast fashion no se caracteriza solamente, tal como muy acertadamente señalas por producción de series cortas, precios bajos y producción barata, sino con un asunto que tiene mucho que ver con la famosa 'obsolescencia planificada'. Muchas prendas de Zara (sobre todo calzado) tienen tan sólo unos cuantos meses de vida útil que logra en ocasiones, apenas llegar a 7. Es decir, creo que desde luego, se trata de el uso de materiales de regular calidad, pero también, de un asunto de 'diseño'. De cómo esta vida útil se hace susceptible de planificación industrial, sobre todo porque si la tendencia es fugaz, qué sentido tiene que la prenda perdure... En fin. Encantado en leerte. Saludos.
ResponderEliminarSaludos, Felipe. Gracias por leerlo.
EliminarEn efecto creo que el tema a mayor escala es un discurso de obsolescencia programada. Esa obsolescencia está validada por el sistema de temporadas (que algo "pase de moda" en un corto periodo de tiempo) pero a la vez, se apoya en diseños y materiales de corta vida. Las revistas de moda y las mismas marcas, promueven este ciclo efímero al decirte que debes "renovar tu armario para otoño" o que "esta silueta ya se ve anticuada", buscando que compres más y más.
Me alegra que me leas, siempre es una delicia encontrar comentarios así de interesantes en los posts. Saludos.
Hola Diana. Me encontré con tu artículo por casualidad y me encantó!
ResponderEliminarSoy diseñadora de moda y llevo 7 años trabajando en mi propia marca de moda ética. Uso materiales y procesos amigables con el medio ambiente y le garantizo a las personas que trabajan conmigo un buen trato y salarios justos. Me he dado cuenta que (como lo dices) es difícil entrar al mercado colombiano con este tipo de negocios porque desafortunadamente al colombiano no le interesa la ética, primero está el precio y la moda. Sin embargo, me motiva mucho trabajar para la inmensa minoría que rescata primero los valores antes que algo pasajero y creo que es posible poner un grano de arena para hacer parte de la solución y no del problema.
Muchas gracias por compartir este artículo y espero que tenga mucho alcance.
Laura Forero
www.facebook.com/tiendanascimento
Hola Laura. Me alegra mucho ver que existen diseñadores enfocados a este tipo de propuestas. Te felicito por tu iniciativa y te deseo mucho éxito!
EliminarMuy interesante tu post, eso ya pasa a nivel de todas las firmas, no solo en colombia, sino en otros paises que otras marcas copian el mismo diseño y sale mucho mas barato y peor calidad, pero es algo que no se puede parar y lo mas triste es la explotacion que hay en los paises como bangladesh, india, etc.
ResponderEliminarEs cierto, ya la ropa que uno compra de "Marcas Nacionales" ya no es confiable, te invito a visitar un nuevo local comercial de este tipo de ropa, muy estilo boutique, bajando por la calle Colombia, se llama Elite, donde se aprecia perfectamente este fenómeno, que empezó como un gran boom de marcas y precios y ahora presenta un panorama algo desolado a sólo 2 semanas de haber inaugurado. Ya no sólo buscamos moda barata, también calidad.
ResponderEliminarGracias¡¡¡¡¡¡ Juliana Correa - OnA
ResponderEliminarAMO tu blog, me leí un montón de artículos ya, es uno más interesante que el otro. Me parece súper responsable de tu parte como comunicadora de moda que toques este tipo de temas. Saludos! Juli. www.trendalist.com.ar
ResponderEliminarHola Julieta. Me alegra que te guste el blog! Muchas gracias! yo creo que la mejor forma de construir la moda como algo valioso es tocando estos temas tan difíciles y tan necesarios. Saludos!
EliminarHola Diana. Me parece muy bueno el trabajo que haces, informando de manera acertada, rápida y concreta con respecto a este tema que ya da mucho de que hablar aquí en Colombia. Me parece que tus conclusiones son muy acertadas y fáciles de difundir debido a la posición en la que estamos, consumidores. Me preguntaba de que piensas al respecto de inexmoda y colombiamoda que se están llevando acabo estos días, acaso hay algo interesante para recalcar de ahí? Gracias por tu tiempo, muy buen blog!
ResponderEliminarHola Juan Pablo. Muchas gracias por tu comentario, me alegra mucho que tengas en estima este espacio. Sobre Colombiamoda destacaría el Pabellón del Conocimiento, una iniciativa gratuita que le permite a quien lo desee, aprender más sobre moda, consumo, mercadeo y hasta cultura. Ese es un programa que le recomiendo a todo el mundo. En la pàgina de Colombiamoda está la programaciòn. Hay conferencias excelentes.
EliminarSaludos!
La responsabilidad social en los diseños y propuestas debe ser considerada con alta relevancia; no se puede caer en le vació de sacar propuestas y modelos de cualquier manera; pues se puede estropear y maltratar al cliente, o usuario.
ResponderEliminarHay cosas que son puro sentido común; pero nos quieren inducir a adoptar estilos de vida que no corresponden a los modelos originales; encontré esto en Internet y me pareció muy razonable.
Por tradición los hombres desde siempre se habían vestido con faldas, solo hace 300 años que los obligaron a usar pantalón.
El pantalón es la prenda menos adecuada para un hombre; el calzoncillo bóxer, hace las veces de férula en los genitales, (propiciando mal funcionamiento, y discapacidades), la costura central del pantalón maltrata, magulla e incomoda todo el tiempo los genitales; la correa o cinturón hace las veces de torniquete, y obliga al corazón a bombear la sangre con mayor esfuerzo, (para vencer la contracción que hace el torniquete), y por mala irrigacion sanguínea afecta: el aparato digestivo, el sistema urinario, el aparato reproductor. Ademas con el uso del pantalón el hombre ha terminado orinando de pie lo cual es totalmente antinatural. Las Faldas y los vestidos con faldas para los hombres son suprema-mente SALUDABLES, CÓMODOS Y CONFORTABLES. El pantalón, el calzoncillo ajustado, la costura central del pantalón, y la correa o cinturón, están promoviendo las enfermedades modernas de los hombres: IMPOTENCIA, ESTERILIDAD, PROBLEMAS DE LA PRÓSTATA Y POSIBLEMENTE CÁNCER DEL TESTÍCULO.
Ninguna parte del cuerpo del varon se maltrata mas que los genitales.
Por salud y comodidad mejor usar FALDAS O VESTIDOS CON FALDA
Me encontré esto en Internet.
La enaguas es una prenda que brinda mucha comodidad y seguridad en el vestuario de las persona s que usan y visten faldas. Las enaguas, no permiten que se vea a tras luz cuando la tela de las faldas son muy transparentes, BRINDAN SEGURIDAD SI EN ALGÚN MOMENTO LA BRISA INTENTARA LEVANTAR LA FALDA.
Los únicos dos inconvenientes de una falda, (para el hombre, o para la mujer, da igual)son por mal diseño, o mala elaboración de la prenda:
Si una falda es muy corta, le toca estarla halando por el ruedo, (o borde), no le cubre mucho y posiblemente se la levante el viento; y si la falda es mu estrecha o angosta, no le deja dar el paso o caminar ni subir las escalas (entonces le tocaría andar de rodillas); pero como les decía es mal diseño, o elaboración de la prenda. Una falda a la rodilla, o 7 cm abajo de la rodilla, es una medida ideal, o del largo que estime.
Por cultura nativa y autóctona los hombres colombianos deberían vestirse con faldas; como los indígenas guambianos del cauca, que usan una falda azul a la rodilla; o como los wayuu de la guajira.
Hola Diana, me parece muy interesante tu blog, puedo pasar horas leyéndolo. Sobre este post te quería contar que el mes pasado tuve la oportunidad de ir a China, la llamada fábrica del mundo, y de ver las plantas de manufactura de distintas marcas, tanto de grandes Retailers como de marcas más lujosas. También fui a otras fábricas, especialmente de electrodomésticos, vi como se hacen las neveras, las estufas, las planchas, entre otros. En general te puedo decir que aunque los procesos industriales son diferentes, los trabajos son prácticamente los mismos. Las condiciones de los trabajadores de las plantas de producción en la industria de la moda rápida, como en muchas otras, pueden ser muy buenas y . Aunque entiendo todo el punto de vista ético que planteas, también hay que examinar la otra parte de la historia, y son los grandes beneficios de ese modelo económico. El desarrollo de China ha sido impresionante, su clase media tiene más poder adquisitivo que cualquier otro país, está muy cerca a erradicar la pobreza y no tiene pobreza extrema. El tema de la contaminación ambiental es el defecto fatal del modelo, pero ya se están emprendiendo acciones para regular a las fábricas productoras. Por un lado la moda rápida acelera el consumo, pero también crea empleos, mueve la economía, distribuye la riqueza, no es tan sencillo el debate. Yo antes de ir a China creía que iba a ver todo en condiciones paupérrimas y que no iba a volver a comprar nada hecho en economías de escala, pero la verdad es que lo que vi no se parece en nada, todas las personas tienen dotación, hay políticas de seguridad industrial, salud ocupacional y los salarios subieron al rededor de un 10% este año. Claro, hay fábricas en Bangladesh donde no se ven esos tratados pero es cuestión de averiguar qué marcas producen allá, porque muchas, como Abercrombie, lo hacían y firmaron un tratado con medidas de seguridad, y con protocolos para el sindicato de trabajadores. Mi punto es que, aunque si bien hay casos en los que la moda rápida no es ética para la mayoría de la gente, hay muchos en los que si lo es, y si alguien quiere hacer un cambio no hay que cambiar la forma en la que la moda se vende, sino la forma en la que se consume. Muchas gracias por el espacio, y de nuevo, eres toda una inspiración. Hasta pronto.
ResponderEliminarHola Luciana, muchas gracias por tu comentario. Tuviste una experiencia privilegiada de visitar y conocer el escenario industrial en China que para mí solo ha sido analizado desde lo que leo y veo en medios. Creo que es positivo que empresas empiecen a desarrollar modelos más justos para el trabajador y también puede ser un efecto de lo que sucedió en Bangladesh y la presión de ciertos grupos de consumidores. No solo te creo, sino que espero que esa perspectiva que das se amplíe a un punto en el que no tengamos que mirar con prejuicio la moda producida en países asiáticos. Para mí el modelo es inevitable y aunque me siento culpable, sigo comprando muchos de sus productos. Aún así, me queda difícil defenderlo porque aunque mejoren las condiciones de manufactura, sigue siendo un sistema creado para promover lo desechable y la obsolescencia programada.
EliminarFrente a tu perspectiva, la mía sería buscar un equilibrio, no solo en que los sistemas de producción sean mucho más sensibles -con el trabajador y con los recursos que se utilizan- sino que los consumidores seamos más responsables también, comprando menos.
No sabes cuánto me alegra cuando encuentro otras personas que se interesan por el tema y pueden comentar al respecto de una manera informada. Agradezco mucho tu atención y tu aporte :)
Hola Diana, acabo de publicar esto en la pagina de Fashion Revolution Colombia, ya comenzamos con las gestiones para organizar el 24.04.15. Esperamos contar con tus valiosos aportes y activismo. Un saludo. Angelica
ResponderEliminarAngélica, muchas gracias por compartirlo. Sabes que pueden contar conmigo. Escríbeme para lo que necesites :)
EliminarBuenas tarde Diana,
ResponderEliminarmi nombre es Juan Pablo Cifuentes y debo decirte que admiro tus puntos de vista, propuestas y demás condiciones que te hacen una gran referente en este tema. Dicho esto, quisiera pedirte tu opinión respecto a mi tesis de colegio (10 grado) en la cual planteo la idea de que la economía global tiene que adaptarse a nuestra alta demanda utilizando la mano de obra de países poco desarrollados (maquilas) en los cuales, tanto la situación social, económica y política han sido afectados, llevándose consigo hambre, degrade social, huelgas, maltrato a mujeres y niños e incluso muertes dentro de las zonas de trabajo, ya sea por la errónea idea de que los gobiernos apoyan a la industria como la mejor forma contra el desempleo, también las ''prometidas'' responsabilidades sociales que estas empresas prometen a la hora de entrar al país y demás.
No obstante, también planteo que hay una MINORÍA de maquiladoras que si respetan los parámetros y responsabilidades laborales en países específicos, generando ingresos, desarrollo, acceso a una mas elaborada profesión, mejor salario e incluso zonas de trabajo mas refinadas, como lo es Taiwán y Vietnam. Por ultimo, hago referencia a Ineke Zeldenrust de la campaña Ropa Limpia(Europa) que ha logrado tratados con H&M, IndustriALL y UNI, promoviendo una mejor relación con el trabajador a otros grupos como PVH( Calvin Klein y Tommy Hilfigher), hay que tener en cuenta que esto ya es una conciencia de la comunidad internacional para parar con esto, también, estas fabricas optarían por estos acuerdos, pues no creo que muchas de ellas quisieran afrontar demandas por estos países u organizaciones.
Finalmente Diana, termino concluyendo de que en la actualidad, las maquilas, la fast fashion, el compulsivo mercado y nuestra demanda no aporta para una mejor realidad en el extremo oriente principalmenteni en ninguna de las economías emergentes de la actualidad. Enserio aprecio mucho que hayas leído esto corta sinopsis de lo que es mi texto, que opinas? estas de acuerdo con lo que propuse? que mas le añadiría? tengo que transformarlo en un discurso, y necesito mas frases sugestivas y dramatismo para generar impacto y conciencia, y en mi opinión tu eres una muy buena conocedora de este tema, y la verdad te agradezco por haberte tomado tu tiempo en leer esto, una opinión o respuesta tuya me vendría muy bien. Sigue así :)
Gracias.
Juan Pablo Cifuentes
Hola Juan Pablo. Si quieres escríbeme a dianalunareja@gmail.com y hablamos del tema. Te recomiendo también hablar con las personas de Fashion Revolution Colombia, pueden ser una buena fuente para tu texto. Siempre es bueno fortalecer el argumento con el apoyo de personas que trabajen en el área de la que hablas.
EliminarMe parece que tienes bien planteada la idea, recomendaría citar fuentes vigentes y hablar de casos como el de Rana Plaza, que movilizó el Fashion Revolution y me parece algo poderoso. En cuanto a mi opinión personal: la industria solo responde a lo que nosotros demandamos como consumidores. Mientras no seamos nosotros los gestores de cambio, nada pasará. Las maquilas son solo negocios, no tienen ética. La ética nos corresponde a nosotros.
Lo que necesites, me escribes :)
Lo fashion y la moda en Colombia tiene una gran influencia de las flores, las mujeres a las que más se les regala www.floresparacolombia.com/flores-medellin.htm y el resto del país es a las que saben aprovechar los beneficios de la moda.
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